Una jirafa en tu ventana

Una de las cosas que he aprendido durante mis estadías en África, es que hay algunos animales más fotogénicos que otros y creo que las jirafas, son de las mejores modelos a la hora de dejarse tomar una fotografía.
 
Además, de entre todos los grandes animales africanos, este puede ser uno de los más pacíficos. A pesar de su tamaño, o quizás debido a él, no son animales que suelen ser agresivos a diferencia de los elefantes africanos, con los cuales tienes que tener cuidado al acercarte.
 
Por consiguiente, en ningún momento sentí que las jirafas fueran animales dominantes por su carácter, más bien tienen como una vibra de que quieren ser tus amigas. Te ven, caminan, comen, te vuelven a ver, y así, si tienes suerte, puedes pasarte un buen rato sin que ni tú, ni ellas, se espanten. Naturalmente curiosas, este no es un animal que te va a atacar y difícilmente huir de ti o del carro en el que vayas, dándote tiempo de admirar su belleza, su energía y de sacarle las fotografías que quieras.
 
Con la característica particular de ser el único mamífero mudo debido a que no poseen cuerdas vocales, logran decirlo todo con la mirada, gestos y lenguaje corporal.
 
Por otra parte, las manchas en la piel de las jirafas funcionan como una especie de huella dactilar, que no solo indican la región en la que habitan, sino que también, las hace irrepetibles las unas de las otras.